Tras leer el post de Sirikon sobre "el auténtico precio de las cosas" y ver el último programa de "La hora de José Mota" (aquí os pongo el vídeo), me he decidido a escribir una crítica sobre las compañías telefónicas. Ahí va. Te acribillan por todos lados con publicidad y ofertas sobre móviles y compañías telefónicas. Precios bajísimos, regalos... Al final es todo mentira. Pero a donde yo quiero llegar realmente es al momento en el que te quieres dar de baja en una compañía. Primero llamas, te tienen un rato esperando, y luego empiezan a ponerte pegas. No sólo no empiezan los trámites inmediatamente, sino que se ponen a ofertarte nuevos productos y tarifas. ¡Que yo lo que quiero es darme de baja! Pero no, ellos siguen ahí, con el cansineo. Venga cansinismo, venga. ¡Que noooooo, tercuzos! Muchas veces te convencen. Aunque no todas. Y ahí es cuando vienen los problemas. Cuando ven que ya no tienen opciones contigo, intentan exprimirte al máximo de sus posibilidades. Se sacan unas cosas rarísimas de la manga para sacarte el dinero. Y eso es un arma de doble filo, porque se les hace mala publicidad y pueden perder clientes, lo que se traduce en pérdidas de dinero. Ahora que se aguanten. Por otro lado están las llamadas que te hacen desde números privados las compañías para darte publicidad e intentar "reclutarte" para que entres en la gran familia que forman sus clientes. Sacarte el dinero es lo que quieren. ¿Por qué no llaman desde un número que se vea? ¿De qué tienen miedo? Así que mi consejo es que os penséis muy bien que compañía vais a elegir y si en verdad os merece la pena.